Los sucesos de la valla de Melilla s e han convertido en un filón para los proetarras para atacar a la Guardia Civil con la complicidad de Sánchez.
Bildu se ha especializado en los últimos meses en exigir duras comparecencias de miembros del Gobierno de Pedro Sánchez en lo que respecta a la investigación de las muertes de inmigrantes en la valla de Melilla y retirar sus exigencias pasados unos meses. Presentó duras peticiones de responsabilidades y comparecencias en el Congreso de los Diputados antes de negociar los Presupuestos y las retiró según se abrió el bazar financiero en el que, no sólo consiguió de Sánchez importantes cantidades de dinero, sino también el premio gordo de expulsar a la Guardia Civil de Navarra.
Ahora Bildu da un paso más en su estrategia política: apunta directamente a esa misma Guardia Civil con una peculiar acusación: la de que los guardias lazaron piedras contra los inmigrantes. Y, de esa manera, pretende lograr dos objetivos. El primero, asestar un nuevo golpe a la Benemérita y culparla de lo ocurrido en la valla. El segundo, dejar una puerta abierta al presidente para que esquive esta crisis culpando a la Guardia Civil y, de ese modo, seguir operativo para continuar dando prebendas a los proetarras y cumplieron con todas sus exigencias.
Los proetarras han dejado constancia de esta estrategia con una petición oficial de investigación a los guardias de la Benemérita presentes en Melilla. El encargado de esta solicitu
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