PAMPLONA- La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Navarra ha condenado a un guardia civil que estaba destinado en la agrupación de Tráfico, José María R.M., de 42 años, y a un abogado que ejerce en la Comunidad Foral, Álvaro C.E.F., de 57 años, por sendos delitos de cohecho.
El agente proporcionaba al letrado información sobre atestados de tráfico para facilitarle clientes a cambio de dinero. La sentencia, dictada de conformidad con las partes, condena al guardia civil por un delito de infidelidad en la custodia de documentos públicos a dos años de cárcel, al pago de 2.880 euros de multa y a su suspensión para el ejercicio de la función pública por el plazo de 3 años, a lo que se unen 6 meses de cárcel y otros 3 años de suspensión por un delito de cohecho. No irá a la cárcel porque se ha suspendido la pena de prisión a condición de que no delinca en los próximos tres años y a que abone la multa impuesta, de 72 días a 8 euros diarios (576 euros).
Por su parte, el abogado es condenado por un delito de cohecho a la pena de 6 meses de cárcel y a la suspensión para el ejercicio de la función pública por el plazo de 3 años. Tampoco cumplirá la pena de prisión si no comete otro delito en los dos próximos años.
Las rebajas en las condenas impuestas a ambos han sido considerables, puesto que el Ministerio Público reclamaba inicialmente cinco años de prisión para cada uno de ellos. El acuerdo se alcanzó después de que la vista oral se hubiera suspendido previamente en dos ocasiones.
Fueron los propios agentes de la Guardia Civil los que atraparon a su compañero, que estaba destinado en Estella y que ya fue trasladado durante la instrucción del procedimiento a otro destino. Los agentes, alertados por la denuncia de una ciudadana que había incurrido en una infracción de tráfico y que recibió sorprendida la llamada de un abogado de Pamplona para ofrecerle sus servicios en el procedimiento judicial que se podía iniciar contra ella, empezaron a realizar indagaciones y a atar cabos que ponían en tela de juicio la profesionalidad de su colega de uniforme.
PAGOS Y SERVICIOS AL AGENTELa sentencia explica que el agente tenía como tal acceso a los atestados elaborados por esta sección por delitos contra la seguridad vial, entre otros, y precisamente el abogado tenía entre sus labores profesionales las de representar y defender los intereses de personas a las que se les pueden imputar delitos contra la seguridad vial.
Tras conocerse ambos en octubre de 2012, acordaron “un plan” por el que el guardia civil remitía al letrado, que ejercía en el Colegio de Abogados de Pamplona, “información relacionada con los atestados elaborados por su Agrupación que fuesen constitutivos de delito o de sanción administrativa para que el letrado se pusiera en contacto con el investigado afectado, con la finalidad de ofrecer sus servicios profesionales”. A cambio el agente percibió una remuneración total cercana a los 400 euros, señala la sentencia.
Tras este acuerdo, el agente remitió al abogado atestados que implicaban a 8 personas (de hecho en uno de los casos no se trataba solo del atestado sino también del informe de antecedentes policiales de uno de los implicados), y además le facilitó un manual interno de la Guardia Civil sobre alcoholemia y drogas, y una circular también de uso interno sobre la actuación del fiscal en materia de seguridad vial. Además, ambos “preparaban los juicios en los que el agente actuaba de testigo y el letrado representaba al acusado”, una relación a la que se suma que el letrado defendió los intereses de un familiar del guardia civil en Córdoba, en concreto en la Fiscalía de Menores.
http://www.noticiasdenavarra.com/2018/02/21/sociedad/navarra/condenan-por-cohecho-a-un-guardia-civil-y-al-abogado-al-que-pasaba-atestados-para-captar-clientes
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